Un informe de la Universidad Austral destacó hoy los indicios de repunte en la producción gasífera reciente y los atribuyó “principalmente al Plan Gas.Ar y al haber definido un precio en boca de pozo en dólares y de largo plazo (al menos cuatro años), que surge de una subasta para abastecer el 70% de la demanda argentina”.

“Las señales del número de etapas de fractura de los meses de mayo y junio fueron superiores en un 70% a las de su pico histórico (julio 2019)”, destacó Roberto Carnicer, director del Área Energía de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Austral.

El analista explicó que el índice de fracturación “es directamente proporcional al crecimiento de la producción y su efecto comenzará a plasmarse en dos o tres meses, si continuamos con esta tendencia”.
El informe de la Universidad Austral precisa, por lo pronto, que la producción total de gas en mayo fue de 121,25 MMm3/día (miles de millones de metros cúbicos diarios), un 3% menos respecto del mismo mes del 2020.

La producción gasífera no convencional representó el 44,86% del total y llegó ese mismo mes a 54,4 MMm3/d, lo que representó un incremento del 3% frente a 12 meses atrás.
En cuanto a la producción de petróleo, el informe señala que fue en mayo de 81,44 Mil m3/día, 13% más respecto del mismo mes del 2020, mientras el no convencional aumentó un 56% interanual y representó el 29,9% del total país.

Carnicer resaltó que “una señal de previsibilidad implica una inmediata recuperación”, y sostuvo que el país “necesita identificar su objetivo energético y planificar los medios”, tras advertir que “si se deja de fracturar se cae la producción».
“Esperemos que, en este período, se manifieste la responsabilidad de nuestros dirigentes en la redacción de leyes que permitan planificar el crecimiento energético», agregó.

Fuente: Editorial RN