En medio de un escenario complejo para la industria argentina, el Grupo Dass, que provee a marcas como Nike, Adidas y Asics, despidió a más de 160 trabajadores en su planta de la provincia de Misiones, con el argumento de “mejorar la eficiencia y competitividad” en el país.
El sector fabril muestra cifras heterogéneas, “con sólo dos sectores recuperándose respecto del mismo periodo acumulado de 2023 (los vinculados a la molienda y la producción de motos)“, de acuerdo con los últimos datos difundidos por la Unión Industrial Argentina (UIA), el cual subrayó que, a junio, no había ”sectores con recuperación productiva, si se compara con el mismo período de 2022″.
En el caso del segmento de Prendas de vestir, cuero y calzado, el último dato disponible de la entidad arrojó para mayo una caída de 5,4% para la variación interanual, aunque en la medición acumulada logró mejoras. Sin embargo, frente al mismo período de 2023, la merma es de 7,7%.
Las desvinculaciones del Grupo Dass no son las primeras del año en la firma. En el inicio de 2025, la compañía ya había cerrado una planta en la localidad de Coronel Suárez, con lo que ya acumula más de 500 despidos en lo que va del año.
En un comunicado, la firma remarcó que “la industria nacional de calzado enfrenta nuevos desafíos por la caída en la producción y la apertura de importaciones, y Grupo Dass no es ajeno a esta crítica situación”. “Frente a la pérdida de competitividad por los altos costos locales y las cambiantes exigencias del mercado, sumado al nuevo contexto cambiario y comercial, hemos agotado todas las alternativas para mantener nuestra estructura actual”, argumentó.
OTRAS EMPRESAS EN CRISIS Y MAS DESOCUPADOS
“Es una situación extremadamente difícil. 165 en total eran despedidos de la planta. Una decisión unilateral”, sostuvo Agustín Amicone, secretario general de Unión de Trabajadores de la Industria del Calzado de la República Argentina (UTICRA) en declaraciones a Radio Urbana.
Previo a ello, la siderúrgica Acindar decidió suspender el 80% de la actividad en la planta de Villa Constitución. Desde la firma indicaron que hay 200 personas suspendidas hasta el 4 de agosto.
Según manifestaron, se llegó a un acuerdo con el sector gremial para suspensión a partir de las necesidades del mercado. Desde la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), atribuyen la decisión al incremento en las importaciones de acero desde China.
La Fundación Protejer resaltó que “la industria textil argentina es crucial para la estabilidad macroeconómica vía impacto en la balanza de pagos, además de sus otras cualidades, como su rol en el empleo y el desarrollo federal” y, al apuntar al actual esquema macroeconómico, consideró que “está generando un deterioro significativo y creciente en la cuenta corriente y la balanza cambiaria, debido al aumento de importaciones y al estancamiento de exportaciones”.
Apuntó, en un comunicado, al “tipo de cambio apreciado y una apertura incentivada y sin control”, junto al déficit en la cuenta de servicios, impulsado por un récord en turismo emisivo».
“Ignorar y renunciar al aporte productivo de la industria textil nacional resultaría en un costo anual superior a los US$8.100 millones anuales en importaciones de indumentaria, lo que superaría las exportaciones de complejos productivos indispensables clave como el maíz, el sector minero-metalífero y litio, aceite de soja, e incluso se situaría en cifras cercanas a la exportación de petróleo”, analizó.
Por ello, evaluó que “promover, desarrollar y fortalecer la industria textil es fundamental para contribuir directamente a la estabilidad económica y cambiaria del país, robusteciendo la balanza de pagos y reduciendo la vulnerabilidad externa”.
SE RECONFIGURA EL MAPA INDUSTRIAL
Dentro del sector automotriz, Mercedes-Benz decidió transferir su producción local y comercialización a Prestige Auto. Si bien la transacción no significa que la marca alemana desaparezca del mercado argentino, implicó un cambio en la gestión de la fabricación local, aunque con la misma cantidad de empleados y presencia comercial de sus productos.
Por su parte, Procter & Gamble (P&G) transfirió su negocio a la firma Newsan S.A., lo que representa un cambio en la fabricación local.
En el sector industrial también hubo un ajuste productivo por parte de Nissan, dado que puso bajo revisión su operación en Argentina y ha reducido su producción local debido a restricciones a las importaciones y volatilidad cambiaria.
A su vez, Nestlé puso en marcha una reestructuración operativa: si bien la firma suiza mantiene producción local, decidió reducir su cartera de productos y personal. Durante este verano implementó vacaciones obligatorias para operarios, indicando ajustes en su modelo operativo sin abandonar completamente el mercado.
Fuente: Bloomberg